Santa Lucía, martir y sevillana

Esta tarde ,después de mucho tiempo, pudimos asistir al besamanos de Santa Lucía, exiliada en la renovada parroquia de San Román. Acudiamos como dos niños apunto de descubrir algo nuevo, llenos de ilusion y con esa mirada especial. Más que por mi, era por mi novia, las ganas que tenía de ir a verla, de estar con Ella y contemplarla de cerca. Ha sido un momento breve pero un momento imborrable, puede que no sea de buen sevillano, pero era la primera vez que pisaba la otrora sede de Los Gitanos, pero no la primera vez después de la restauración, sino la primera vez de mi vida. Solo sé que ha sido un día especial, un momento especial, una imagen especial y bellisima. Espero no tardar tanto en volver, sobre todo por ella (ella mi novia y Ella Santa Lucía) es de esas cosas que te dan un pellizquito muy hondo y que siempre se llevan en ese lugar especial que todos tenemos para nuestras cosas.